Carácter del perro Beagle
El Beagle es un perro muy bueno con los niños y con otros perros. Disfruta de la compañía de la familia. Muy cariñoso, alegre, inteligente, decidido y tranquilo, no es nada agresivo, de hecho, suele tardar poco en congeniar con extraños, lo que no quiere decir que no ladre o aúlle.

Aunque no es de gran tamaño, es fuerte y resistente, adaptándose a cualquier condición meteorológica y pudiendo vivir en el exterior. La actividad que necesita le dificulta el acostumbrarse a la vida en el interior de un piso.
De carácter independiente, puede llegar a despistarse si lo sacamos a pasear suelto por zonas boscosas.

Otro punto al que debemos prestar atención es la educación en obediencia.
Al ser perros tan resueltos pueden acabar por caer en la terquedad, complicando el adiestramiento, aunque, en general, son obedientes.

Cuidados básicos para la raza Beagle
Esta raza destaca por su gran sentido del olfato. Como además necesitan mantenerse activos, es buena idea que organicemos actividades de búsqueda en las que deban encontrar un objeto o una persona escondida olfateando el suelo. Es importante ofrecerles actividad y estímulos para que no caigan en el aburrimiento o la frustración.

Necesitan y valoran la compañía, por lo que no podemos dejarlos solos durante muchas horas. La conformación de sus orejas dificulta la ventilación del conducto auditivo, por lo que debemos vigilar los oídos regularmente para prevenir la otitis.

Su pelo corto es fácil de mantener pero, si lo sacamos con frecuencia al parque, es conveniente revisarlo para detectar la presencia de parásitos, heridas o fragmentos vegetales incrustados en cualquier parte del cuerpo.